miércoles, 26 de agosto de 2009

Tu envidia es mi progreso

Quiero reiterar a los críticos del gobierno, que critican algunos con cierta razón y otros porque tienen el alma carcomida por la envidia.

El presidente Alan García nos alegra la vida (y de paso abastece a este blog) con otra de sus ocurrentes frases. Y claro, sólo hay que preguntarle (con el debido respeto a su alta investidura, no vaya ser que me enjuicie), ¿Qué diablos cree que le podemos envidiar? ¿Su nauseabundo primer gobierno? ¿Su patético segundo gobierno? ¿Sus deprimentes compañeros apristas? ¿Sus tetas de mamacha anticuchera? ¿Su tinte que puntualmente se unta en la chimba?

2 comentarios:

Unknown dijo...

Bueno, podríamos envidiarle los faenones apristas, el departamento en París en el que vivió durante su exilio dorado y las cuentas en Gran Caimán de su primer gobierno.
besitos,

Jimmy dijo...

El depa en Paris! eso envidio yo.